Si fuera
necesario dar una definición lo más breve posible del imperialismo, debería
decirse que el imperialismo es la fase monopolista del capitalismo. Esa
definición comprendería lo principal, pues por una parte, el capital financiero
es el capital bancario de algunos grandes bancos monopolistas fundido con el
capital de los grupos monopolistas industriales, y por otra, el reparto del
mundo es el tránsito de la política colonial, que se extiende sin obstáculos a
las regiones todavía no apropiadas por ninguna potencia capitalista, a la
política colonial de dominación monopolista de los territorios del globo
enteramente repartido (...)
Conviene dar
una definición del imperialismo que contenga los cinco rasgos fundamentales
siguientes: 1) la concentración del grado de capital llevada hasta un grado tan
elevado de desarrollo, que ha creado los monopolios, los cuales desempeñan un
papel decisivo en la vida económica 2) la fusión del capital bancario con el
industrial y la creación, sobre la base de este “capital financiero”, de la
oligarquía financiera; 3) la exportación de capitales, a diferencia de la
exportación de mercancías, adquiere una importancia particularmente grande; 4)
la formación de asociaciones internacionales monopolistas de capitalistas, las
cuales se reparten el mundo y 5) la terminación del reparto territorial del
mundo entre las potencias capitalistas más importantes.
LENIN, V. El imperialismo, fase superior del capitalismo,
1917.
No hay comentarios:
Publicar un comentario